Un día, el maestro hizo la siguiente pregunta a sus discípulos:
"¿Por qué las personas gritan cuándo se han enfadado?".
"Gritan porque pierden la calma", contestó uno de ellos.
"¿Pero por qué gritar si la persona está a tu lado?de nuevo el maestro dijo.
"Bien, gritamos porque deseamos que la otra persona nos escuche" otro discípulo repitió. Y el maestro volvió a preguntar:"¿Entonces no es posible hablarle en voz baja?" Varias otras respuestas fueron dadas pero nadie convenció al maestro.
Entonces él exclamó:"¿Ustedes saben por qué se grita contra otra persona cuándo se esta enfadado? El hecho es que cuando dos personas se han enfadado sus corazones se alejan mucho. Para cubrir esta distancia hace falta gritar para poderse escuchar. ¿Cuanto más enfadados son mucho más fuerte tendrán que gritar para sentirse uno con el otro. Por otra parte, ¿que sucede cuándo dos personas están enamoradas? Ellos no gritan, hablan despacio, despacito. ¿Y por qué? Porque sus corazones están muy cercanos. La distancia entre ellos es pequeña. A veces están tan cercanos sus corazones que tampoco hablan, susurran. Y cuando el amor es más intenso tampoco es necesario susurrar, basta con mirarse. Sus corazones se entienden. Es ésto que ocurre cuando dos personas que se aman se acercan".
De los Hechos de los Apostoles:
"Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar. De pronto, vino del cielo un ruido, semejante a una fuerte ráfaga de viento, que resonó en toda la casa donde se encontraban. Entonces vieron aparecer unas lenguas como de fuego, que descendieron por separado sobre cada uno de ellos. Todos quedaron llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en distintas lenguas, según el Espíritu les permitía expresarse." (Hch 2, 1-4)
Comments